Entre las terapias que brinda el Hospital de Rehabilitación del IGSS se encuentra la terapia de lenguaje que de 2017 a la fecha ha beneficiado a 11 mil 394 niños, que padecen de discapacidad sensorial auditiva como sordera e hipoacusia, en sus distintos niveles.

En la terapia del lenguaje los especialistas enseñan a los niños a poner atención visual, de sensibilización auditiva en uso y aceptación de auxiliares, identificación, discriminación y ubicación de sonidos, haciendo énfasis en la socialización para crear necesidades de comunicación.

Entre las herramientas de este tipo de terapias también se encuentra la lengua de señas o lengua de signos que es una expresión y  configuración de gesto-especial, percepción visual y en algunos casos táctil en casos especiales de sordo ceguera, explicó la doctora Karina Rodríguez, directora del Hospital de Rehabilitación del IGSS.

Proceso de atención

Los niños que asisten a sus Unidades periféricas y Hospitales en el área metropolitana o en el interior del país, son atendidos por los especialistas que analizan los casos y después tras una serie de evaluaciones establecen qué niños necesitan de la terapia de lenguaje, son trasladados al Hospital de Rehabilitación.

En el proceso también hay evaluación por un psicólogo, eso se debe a que la atención está dirigida al niño pero también a su familia para concientizarla en cuanto al proceso de terapia del lenguaje que se realizará.

Terapias

“El servicio que brinda el IGSS es completo, porque en el Hospital de Rehabilitación brindamos terapias de audición y lenguaje a niños que padecen de hipoacusia o comúnmente conocida como sordera, en sus distintos niveles: leve, moderada, profunda y total, que es la pérdida total de la percepción del sonido”, dijo la licenciada Evelin Rosario Cordero Aguirre, médico especialista del Hospital de  Rehabilitación.

La sordera puede ser congénita, heredada o adquirida y dependiendo del diagnóstico se brinda un tratamiento personalizado e integral a los niños, dio a conocer Cordero, quien también añadió que la comunicación es muy importante para el desarrollo de los seres humanos porque ayuda en la cognición, memoria, aprendizaje y el lenguaje.

Los signos que podrían indicar que el niño padece de discapacidad sensorial auditiva son: que el niño no reaccione o voltee la cabeza al sonar objetos o hablarle desde distintas direcciones, si no busca fuentes de sonido y ve a sus padres como para comprender lo que se le está indicando o si perdió sonidos orales sin causa después de los 15 o 18 meses, a estos signos los padres deben prestar atención y asistir a su  periférica del IGSS en donde pediatras estarán prestos a brindarles la atención y de ser necesario adherirlo a las terapias de lenguaje, concluyó Rodríguez.